Pecas, ¿Qué son y qué revelan sobre tu piel?
La piel de la mayoría de las personas cambia con las estaciones: algunos notan más sequedad durante el invierno, otros perciben un enrojecimiento cuando llega la primavera y a otros les salen pecas en el verano. Aunque existen muchos productos formulados para tratar la sequedad y el enrojecimiento de la piel, no hay muchas opciones para evitar la aparición de nuevas pecas.
De hecho, las pecas no se pueden eliminar por completo, pero al menos podemos comprender por qué aparecen. Por tanto, ha llegado el momento de profundizar en las causas de las pecas y responder algunas de las preguntas más frecuentes sobre este asunto. ¡Descubre todo lo que necesitas saber sobre las pecas!
¿Qué son las pecas?
Aunque la mayoría de las personas piensan que son manchas inofensivas que aparecen en la piel durante el verano, en realidad las pecas han sido objeto de una profunda investigación científica. Conocidas como “efélides” en la comunidad médica, las pecas son pequeñas manchas pigmentadas que aparecen en la piel.
Sin embargo, las pecas no aparecen al azar. Se pueden encontrar en cualquier parte del cuerpo, pero suelen aparecer en las áreas más expuestas al sol, como la cara, los brazos, las manos, el cuello y las piernas. Al igual que la mayoría de los problemas de la piel relacionados con la exposición al sol, las personas de piel clara, sobre todo aquellas de cabello rubio o pelirrojos, son más propensas a verse afectadas.
Un estudio publicado en la revista Pigment Cell & Melanoma Research descubrió que las pecas disminuyen con la edad y son más frecuentes en las mujeres. Esta investigación también confirmó que las pecas son más visibles después de habernos expuestos al sol, lo cual explica por qué se asocian a la llegada del verano.
¿Por qué salen las pecas?
No importa cuánto intentes evitar las pecas, esas manchas estacionales terminarán empolvando tus hombros porque tienen un origen genético. Eso significa que algunas personas tendrán pecas y otras no, aunque tengan una piel idéntica o hayan pasado el mismo tiempo bajo el sol. Los investigadores han encontrado que su origen se encuentra en lo que llaman el “gen de las pecas”. Un informe publicado en la revista Human Molecular Genetics confirmó que la presencia del gen del receptor de la melanocortina-1, también conocido como MC1R, y sus variantes son la principal razón genética por la que algunas personas desarrollan pecas.
¿Las pecas son motivo de alarma?
No hay razón alguna para alarmarse, pero las personas que son más propensas a tener pecas deben tener en cuenta algunos detalles importantes. Por ejemplo, aunque la mayoría de las pecas son benignas, el gen MC1R también se ha asociado con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de piel. Según un estudio publicado en la Journal of Investigative Dermatology, esto se debe a que los portadores del gen MC1R tienen una mayor sensibilidad al sol y muestran cambios en la pigmentación de la piel con regularidad. Ambos factores contribuyen a que los portadores de este gen sean más susceptibles a desarrollar melanoma .
Usando la escala Fitzpatrick , el citado estudio descubrió que el 75% de las personas que se queman con facilidad bajo el sol y no se broncean, experimentan mutaciones del melanoma, y el 55% de quienes se queman fácilmente, no se broncean y tienen pecas, generalmente los pelirrojos, experimentan mutaciones del melanoma a lo largo de su vida.
Debido a la alta incidencia de casos de melanoma en las personas que se queman con facilidad y tienen pecas, es conveniente abordar este asunto con el dermatólogo y monitorear las pigmentaciones irregulares.
¿Cómo puedes proteger tu piel?
¡Ser consciente de todo esto es clave para prevenir el cáncer de piel! Si tienes pecas, significa que eres sensible al sol y debes extremar las precauciones.
Como podrás suponer, la mejor estrategia para protegerte consiste en limitar el tiempo de exposición al sol. Además de usar ropa que proteja la piel, es importante que utilices una loción con SPF de amplio espectro durante todo el año, fundamentalmente en las partes del cuerpo que están expuestas directamente a la luz solar.
Por último, es fundamental que prestes atención a los cambios que sufre tu piel y que hables con tu dermatólogo si las manchas tienen un aspecto anormal. Cuando el melanoma maligno se detecta en las primeras etapas, casi siempre tiene cura . Por tanto, si te mantienes atento a la salud de tu piel, podrás absorber los rayos del sol sin preocupaciones.